La Huerta Zen es un espacio donde nos conectamos con la MADRE TIERRA y sus ritmos.

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Es una huerta orgánica donde intentamos ser respetuosos con la vida de este reino.

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Las semillas que utilizamos son orgánicas y son el mayor tesoro de Mahuá.

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Si bien la idea es sembrar para producir parte de nuestro alimento,

sembramos también la semilla de la consciencia en nuestro interior,

creando un vínculo con cada especie.   

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Una huerta llena de flores crea un ecosistema mágico con insectos benéficos

para que el lugar sea sano y con mucha vida.

 

Por ello la etapa de la floración de cada especie no solo es importante por las semillas

y la belleza que crea en el lugar

sino también para preservar la danza del ecosistema que se gesta.

 

La naturaleza al interactuar con ella nos transmite sus enseñanzas de manera sutil pero muy clara.

Nos ayuda a vivir nuestros procesos internos aceptándolos con confianza y alegría.

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Las tareas que se realizan en este espacio facilitan una meditación activa 

y el ingreso a nuestro interior para una buena cosecha de frutos.

 

Cuando interactuamos con la tierra nos sanamos, nos conectamos con nuestras raíces y la magia ceremonial.

La Medicina de la Tierra. 

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La huerta zen es una práctica de atención plena.

De vivir el presente.

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En Mahuá todo está proyectado como espacio de BOSQUE COMESTIBLE,

donde el principio dador y de abundancia de la Madre Naturaleza

se expresa y manifiesta en todo su esplendor.

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Una Visión de cómo puede ser nuestro planeta si plantáramos por doquier especies con frutos

para disfrutar mientras vamos por la vida.